Qué puede ocurrir durante una sesión de Reiki
¿Estás planteándote reservar una terapia de Reiki?
Lo más habitual es hacer la primera sesión de Reiki con fe plena en el terapeuta pero sin saber muy bien qué va a pasar.
Y la verdad es que lo mejor es ir sin expectativas.
Lo que tiene el trabajar con la energía es que todos somos diferentes, que la energía no se ve pero se siente y que cada uno, dependiendo de nuestra vida y de lo que acumulamos en nuestro interior, tendremos unas u otras sensaciones.
Para el terapeuta de Reiki, es lo mismo. Cada paciente es un mundo y cada sesión un misterio hasta que te pones en faena.
Que pasa en una primera sesión de Reiki:
ENTREVISTA:
Cuando contactas con un Terapeuta de Reiki, lo normal es que en la primera visita intente conocerte. Así que lo más fácil es tener una entrevista para realizar un esquema de tus síntomas, enfermedades anteriores o actuales, medicación, rutinas, relaciones familiares, anhelos, miedos… Es un repaso de tu vida desde tu nacimiento hasta el momento actual.
Lo ideal es que ya vayas un poco preparado para ahondar en temas que te han podido afectar o que sean relevantes. Pero no te preocupes si no lo tienes claro, en realidad el Terapeuta sabe por dónde guiar esa conversación para averiguar la raíz de tus males.
LOCALIZACIÓN DE LOS BIHOSEN:
Después de la entrevista pasamos al Relax.
Con toda la información recogida, empieza el testeo o localización de los Bihosen. En esta parte de la sesión, en camilla y siempre vestido, el terapeuta hace un repaso de tu aura o capas de energía para localizar donde y en qué grado la energía se encuentra bloqueada.
Se hace a través de las manos pero también se puede utilizar material de apoyos como péndulos y minerales que ayudan a confirmar lo que sentimos por las manos o nos llega en modo de imagen, sonidos u olores.
¿Y después qué?
En Reiki, la imposición de manos es una técnica más de lo que supone la Terapia en sí.
Reiki ahonda en tus emociones y situaciones personales, así que es muy efectivo combinar la imposición de manos con ejercicios como meditaciones guiadas, regresiones o constelaciones familiares, que puede hacer el mismo terapeuta de reiki en camilla, si tiene los conocimientos adecuados.
Es una manera más de acceder al subconsciente, que es quien realmente te muestra la realidad de lo vivido y la respuesta que tú necesitas.
Así que en una sesión de Reiki, puedes sentir calor por la imposición de manos del terapeuta, sensación de volar o ascender a otro plano, relax y pesadez del cuerpo, tener visiones de momentos pasados y vividos o de otras vidas de las que no somos conscientes, ver colores, recordar olores, frío… Te puedes incluso dormir.
Lo más habitual es alcanzar un gran estado de relax y bienestar.
Cada paciente es un Alma con un pasado y un presente distinto y cada Terapeuta tiene una sensibili
Lo que sí es seguro es que si tomas la decisión de realizar una terapia de Reiki y confiar en ella, tu vida dará un gran cambio, si tú estás dispuesto a ello.
Mi único consejo es que te sientas tranquilo y que lo hagas con un terapeuta que te dé mucha confianza y con el que te sientas respetado.
Ahondar en tu vida es un gran proceso que mejora tu salud mental y física. Cada uno a su ritmo.